¿Cuánto se revaloriza un piso reformado?
No hay que ser un experto en el mercado inmobiliario para saber que una vivienda reformada vale más que una similar que no lo está.
El estado de la vivienda es un elemento que influye directamente en la valoración de esta. El estado de conservación es un factor determinante por lo que, si se ha reformado el piso o casa, el valor crecerá.
La pandemia y sus consecuencias en forma de confinamiento han hecho incrementar de manera exponencial las reformas en nuestros hogares. Nos hemos pasado mucho tiempo dentro de nuestras casas últimamente y hemos visto la necesidad de acomodarlas a nuevas experiencias.
Una, por ejemplo, es el teletrabajo. Una parte importante de la población va a comenzar a teletrabajar, por lo menos parcialmente, en los próximos años. Disponer de un espacio para ello es vital para ser eficiente en el trabajo.
La reforma de parcial de una vivienda para acondicionar un espacio para el teletrabajo es solo un ejemplo de los muchos se dan día a día.
No hay que olvidar que los negocios rurales también han tenido su gran incremento de relevancia en la última década. La compra de inmuebles o viviendas en abandonas o en condiciones desastrosas para su posterior reforma y puesta a punto como casa o alojamiento en el entorno natural es una constante.
Y con futuro, pues cada vez más gente busca un lugar tranquilo en el que pasar unos días libres o sus vacaciones.
Compra por un precio muy bajo de una vivienda, reforma y puesta en marcha de un negocio rural es un proceso más que común.
¿Por qué reformar una vivienda?
Si tienes un inmueble y está en unas condiciones un tanto anticuadas o deslucidas una reforma es una gran opción. La vivienda, una vez esté rehabilitada, puede ser utilizada para diferentes fines: residencial, un activo de venta o también para montar un negocio.
Una reforma con fines económicos
Hemos dicho que se incrementa el precio de una vivienda si ha recibido reformas últimamente. En comparación con un piso nuevo, uno con cierta edad, pero reformado, ya sea parcial o íntegramente, puede venderse de manera más ágil al haber menos pisos nuevos.
Si tienes un piso en el centro y necesita una reforma no deberías pensártelo mucho, ya que es en el centro de las ciudades donde más complicado es construir de obra nueva y, por tanto, toda aquella vivienda que se acerque a las calidades de una de nueva construcción es muy tentadora.
Comparar un piso nuevo a una reformado en el mismo barrio es algo que harán los potenciales compradores en un momento dado del proceso. La diferencia de precio será la clave, como en casi todo. Si la diferencia es relativamente pequeña es muy probable que el potencial comprador se decante por una construcción de obra nueva. Aunque en un principio tenga que esperar más, debido a los plazos de construcción, la calidad de todos y cada uno de los materiales del edificio, incluido zonas comunes, trasteros, plazas de garaje será, a priori, superior a la de un edificio con más años.
En cambio, si el precio es muy diferente y el piso nuevo cuesta mucho más que el reformado, seguramente el potencial comprador opte por el más antiguo. A pesar de que las zonas comunes no sean de igual calidad, está claro que un 30 o 40% de diferencia en el precio lo compensa.
Rehabilitar la vivienda para vivir
Claro que siempre puedes reformar tu casa para mejorar tu calidad de vida. No siempre las reformas van antes de una venta o de la puesta en marcha de un negocio. Se trata de construir un hogar más acogedor, moderno y ajustado a las necesidades y, ¿quién no quiere eso?