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Consejos para negociar el precio a la hora de comprar una vivienda 

Comprar una propiedad inmobiliaria es una gran inversión en la que tanto el comprador como el vendedor esperan obtener la mayor ventaja al comenzar a negociar: el vendedor espera conseguir el precio más alto por su vivienda, mientras el comprador va a buscar obtener descuentos sobre el precio ofertado. 

En general, negociar el precio solo es posible cuando se trata de viviendas de segunda mano, ya que cuando se trata de obras nuevas los precios suelen permanecer invariables, y la flexibilidad en la negociación se traslada a la forma de pago o de la financiación. 

En cambio, en muchos casos es posible establecer una negociación cuando se trata de una propiedad de segunda mano, y lograr descuentos, de acuerdo con datos del portal inmobiliario Fotocasa, que pueden estar entre el 7 % y el 10 %; aunque esto va a depender de la situación en ese momento del mercado inmobiliario. 

Conocer el panorama inmobiliario 

Otro dato aportado por Fotocasa es que alrededor de un 10 % de las negociaciones pueden terminar con un precio superior al de la oferta inicial, especialmente cuando hay exceso de demanda. Por eso es tan importante conocer cuál es la situación local y general del negocio inmobiliario. 

De acuerdo con un informe del Observatorio Inmobiliario, publicado en abril de este año, la situación en la compraventa de viviendas en España se mantendrá estable en 2023, con una ligera disminución en las ventas, en comparación con las cifras anteriores a la pandemia. 

Esto se puede interpretar como una situación favorable para los compradores, que tendrán más oportunidades para negociar el precio de la propiedad que les interese. Pero la situación puede variar en cada comunidad autónoma y en cada ayuntamiento. 

Saber cuánto puedes pagar 

Es importante saber cuál es tu situación económica antes de comenzar la negociación de una propiedad. Si el valor de la propiedad está muy por encima de lo que puedes pagar, no tiene sentido regatear, ya que, tal y como mencionamos más arriba, es poco probable que consigas bajar el precio más allá de un 10 %. 

También es importante saber cuánto dinero tienes ahorrado, cuánto puedes conseguir a través de préstamos de familiares o amigos, cuánto puedes obtener vendiendo algunas propiedades o activos y de cuánto podría ser la financiación del banco. 

Negociar sin dejar de ser realista 

Por un lado, debes llevar adelante una negociación amistosa, que no se convierta en un regateo, porque en ese caso es poco probable que logres tu objetivo, y más bien generes rechazo en el vendedor.  

Negocia el precio sabiendo que vas a obtener algunas ventajas, pero que el otro lado también espera obtener beneficios. 

Otro aspecto que debes tener en cuenta es que debes tener dinero disponible para cerrar la negociación. Este dinero se entrega como un depósito o señal de compromiso, que también se conoce como contrato de arras. 

Conocer las condiciones de la vivienda  

El estado del inmueble es uno de los factores claves en las negociaciones de compraventa. También es importante su ubicación, cercanía a escuelas, comercios y centros de salud; acceso a transporte, seguridad, etc. 

También es importante el tiempo de construcción de la vivienda, las condiciones del cableado y las tuberías y otros aspectos que pueden incidir en el valor de la propiedad. 

Apoyarte en una agencia inmobiliaria 

Negociar a través de una agencia inmobiliaria puede ahorrarte muchos sinsabores y pérdida de tiempo.  

Las agencias cuentan con profesionales que pueden asesorarte en la presentación de la oferta y en cómo puedes obtener rebajas. También pueden indicarte si el precio del inmueble es justo o si hay posibilidades de obtener una rebaja, y facilitar todos los trámites legales y administrativos de la compraventa. 

Negociar con un particular y negociar con agencias

Si te toca realizar la negociación directamente con el propietario, debes saber que a menudo estos colocan un precio muy alto para luego ir ajustándolo, de acuerdo con las ofertas que se presenten. 

Un punto de arranque en la discusión de precios con un particular puede ser una tasación del inmueble, que igual va a ser necesario para el préstamo hipotecario. 

Conocer la situación del vendedor 

Saber por qué se está vendiendo una propiedad puede ser de utilidad para el comprador. Si el vendedor necesita vender con cierta urgencia, es probable que esté más abierto a rebajar el valor de la vivienda y aceptar la oferta del comprador.