Si estás pensando en vender o comprar una propiedad, es probable que te hayas encontrado con los términos «tasación» y «valoración de mercado». A menudo, estos conceptos se utilizan de manera indistinta, pero tienen diferencias fundamentales que es importante conocer. A continuación, te detallo las diferencias entre ambos términos y te indico en qué situaciones es más conveniente optar por cada uno.

¿Qué es una tasación y por qué es importante?

La tasación es un proceso oficial y formal en el que un tasador profesional, generalmente homologado y certificado, determina el valor de una propiedad. Este valor se basa en criterios técnicos y objetivos, siguiendo normativas específicas, como la Orden ECO/805/2003 en España.

El valor de una tasación reside en su carácter legalmente reconocido. Se utiliza en situaciones donde se requiere un documento oficial, como la obtención de una hipoteca, en procedimientos judiciales, o para calcular el valor de una inversión o herencia. Además, la tasación es una garantía tanto para compradores como para entidades financieras, asegurando que el valor asignado a una propiedad es justo y razonable según el mercado y las características intrínsecas del inmueble.

Un aspecto crucial a tener en cuenta es que el valor de tasación es más conservador, dado que se realiza pensando en una estabilidad a largo plazo y en evitar sobrevaloraciones que podrían resultar problemáticas en caso de crisis económicas.

Valoración de mercado: Definición y diferencias clave con la tasación

Por otro lado, la valoración de mercado es una estimación del precio al que una propiedad podría venderse en un momento específico, teniendo en cuenta las condiciones actuales del mercado. A diferencia de la tasación, la valoración de mercado no sigue un procedimiento normativo estricto y puede variar significativamente dependiendo de la oferta y la demanda, la economía local y otros factores externos.

La diferencia fundamental entre una tasación y una valoración de mercado es que esta última carece de reconocimiento legal. Es una herramienta más flexible, utilizada principalmente por agentes inmobiliarios o propietarios que desean establecer un precio de venta competitivo.

La valoración de mercado es útil para conocer la percepción del mercado sobre una propiedad en un momento determinado, pero no debe confundirse con la tasación, que es la que las entidades financieras considerarán a la hora de conceder un préstamo hipotecario.

En resumen, mientras que la tasación es un proceso reglado y con validez jurídica, la valoración de mercado es más subjetiva y está sujeta a fluctuaciones temporales.

Factores que influyen en la tasación y en la valoración de mercado

Aunque tanto la tasación como la valoración de mercado buscan establecer el valor de una propiedad, los factores que se consideran pueden variar, así como el enfoque que se adopta en cada proceso.

En la tasación, el tasador se centra en aspectos objetivos como la ubicación del inmueble, su estado de conservación, la superficie, las instalaciones y las cargas que pueda tener. Se utilizan métodos como la comparación con otras propiedades similares, el enfoque de costos (considerando cuánto costaría reconstruir la propiedad) y el enfoque de ingresos (en caso de que la propiedad genere rentas).

Por su parte, la valoración de mercado puede considerar los mismos factores, pero los pondera de manera diferente. Aquí entran en juego aspectos como la percepción del comprador potencial, las tendencias del mercado en la zona, la urgencia de la venta, y otros factores más subjetivos que pueden hacer que el precio de mercado sea más volátil y menos predecible que el valor de tasación.

¿Cuándo utilizar una tasación y cuándo optar por una valoración de mercado?

Es esencial conocer en qué momentos resulta adecuado emplear cada uno de estos procedimientos. Si estás en una situación en la que necesitas un documento con validez legal, como para solicitar una hipoteca, resolver una herencia, o participar en un proceso judicial, la tasación es imprescindible. Este proceso te proporcionará un valor certificado que será reconocido por instituciones y organismos oficiales.

En cambio, si tu objetivo es simplemente establecer un precio de venta o evaluar si es un buen momento para poner tu propiedad en el mercado, una valoración de mercado puede ser suficiente. Esta te dará una idea de cuánto podrías pedir por tu inmueble según las condiciones actuales del mercado, aunque este valor puede cambiar rápidamente si las condiciones económicas o de la zona varían.