Los compañeros de la Asociación Española de Análisis de Valor, más conocida como AEV, publicaron el pasado mes de abril una noticia que no hace más que confirmar lo todo el mundo predecía: el mercado de las tasaciones está en aumento.

Concretamente, según los datos de la AEV, la cifra de negocio del sector de valoraciones oficiales en España fue de casi 290 millones de euros, lo que nos da un incremento de más de un 14% en relación con el año anterior.

Otro llamativo dato es que ha subido un 16% el volumen de tasaciones, con un total, en el año 2021, de más de un millón, concretamente 1.157.000 en todo el territorio español.

Hay que poner en contexto estos datos, pues obviamente están influidos por la pandemia por COVID-19. Que mejoren el rendimiento del mercado en general en 2021, respecto a los números del 2020 tiende a ser normal, pues las épocas de confinamiento y parón económico más importantes ocurrieron en el 2020.

Sin embargo, la actividad del mercado de valoraciones está por encima de los niveles de 2019, por lo que, en tiempo récord, se ha recuperado el sector.

Hay que recordar que los datos son de las 22 sociedades de tasación asociadas a la AEV, entre las que, por supuesto, se encuentra Aesval como empresa homologada por el Banco de España para realizar valoraciones oficiales.

Crecimiento importante en las tasaciones hipotecarias

Que el mercado inmobiliario está creciendo se nota en diferentes índices. Uno sin duda es este que analizamos, cómo se ha incrementado el nivel de tasaciones. Pero hay otro, por ejemplo, el aumento de la demanda de la vivienda nueva y usada.

Relacionado con este movimiento creciente de la compra de viviendas, está el aumento significativo de las valoraciones hipotecarias, que crece en 32 puntos respecto al año pasado.

Lo que quiere decir, que, de manera rápida y ágil, se está recuperando el sector inmobiliario de la crisis pandémica iniciada a principios del año 2020. La venta de casas nuevas que requieren de un crédito hipotecario también ha subido durante 2021, lo que hace pensar que, en términos generales, el sector se mantiene firme.

Uno de los causantes de esa firmeza es que los cimientos del mercado inmobiliario son fuertes, no como en la crisis de 2008, cuando estalló un panorama financiero y económico sin precedentes y donde el sector de la construcción fue uno de los más afectados, sino el que más.

Ahora ha sido diferente, muy diferente. Los pilares del sector estaban bien asentados, no había los niveles de especulación urbanística de hace 15 años y se ha conseguido, con los números en la mano, que la pandemia haya pasado y dejando consecuencias, cierto es, pero de mucho menor calado de lo que se había pensado en un primer momento.

Según los datos de la AEV, el crecimiento ha sido común en casi todas las regiones del país, donde el peso de las grandes ciudades, como Madrid y Barcelona, sigue siendo el más importante.

Estaremos atentos a nuevos datos oficiales, tanto de los expertos de la AEV, como de otros organismos del sector, para ver si en el 2022 las cosas siguen marchando igual de bien para el sector de la tasación y el mercado inmobiliario en general.