El certificado energético es un documento de interés cuando se realizan negociaciones de compra-venta y alquiler de una vivienda. Los propietarios interesados en ofertar sus inmuebles a futuros propietarios o inquilinos deben tramitar el documento que certifica que su propiedad cumple con lo indicado en el Real Decreto 235/2013, de 5 de abril referente a los certificados energéticos.

Es importante destacar, que es un requisito vigente desde el 01 de junio del año 2013, por lo que es obligatoria su tramitación y presentación ante el organismo oficial respectivo, para que se certifique la eficacia energética de la vivienda y que el alcance de sus beneficios va mucho más allá de un requisito o impuesto.

Qué es el certificado energético

Los certificados energéticos son documentos donde un profesional del área informa o certifica la clasificación, eficacia, consumo y demás características energéticas de un inmueble. También, es un certificado que incluye información del procedimiento técnico realizado y las posibles recomendaciones para mejorar las condiciones energéticas.

Son documentos que deben contar con la certificación de un organismo oficial de la comunidad autónoma para que pueda ser válidos. El propietario necesita informar, de forma certificada, sobre la clasificación energética de su inmueble.

Importancia de los certificados energéticos

Los certificados de energía recogen los datos energéticos de las viviendas, lo que ha sido muy útil para los futuros residentes de las viviendas ofertadas en el mercado inmobiliario durante los últimos años. Es una medida reglamentaria que ha permitido incrementar el etiquetado energético de las viviendas.

Son certificados que han facilitado información técnica y precisa sobre el estatus energético de las casas, usando una tabla con siete opciones de eficacia energética, consiguiéndose que la mayoría de los inmuebles están en rangos mejorables en materia energética, ya que se ubican en los puestos E, F y G, con recomendaciones viables para optimizar las instalaciones de energía.

En ese sentido, los certificados energéticos han aportado información clave que indica que hay mucho por hacer en materia energética en el país, ya que la eficacia es baja y el consumo promedio energético supera el 90%.

Las autoridades han podido obtener datos reveladores que les han permitido concluir que más de un 50% de las propiedades o edificaciones de España, necesitan de mejoras para optimizar el consumo de energía. Es un aspecto pendiente para solucionar el grave problema del gasto y costos que la energía representa para los españoles.

Cuál es objetivo principal de los certificados energéticos

Los Estados europeos tienen por objetivo contar con información actualizada sobre la clasificación energética de las viviendas, para impulsar reformas que mejoren su eficacia energética.

Además, su regulación dicta la norma que las viviendas construidas desde el 31 de diciembre del año 2020, cuenten con instalaciones aptas para un consumo de energía prácticamente nulo.

La mayoría de los edificios obtienen la clasificación E, desde el punto de vista del consumo energético. Un dato revelador es que más de seis millones de viviendas se construyeron hace más de cincuenta años en España y necesitan reformas en esa materia.

Datos importantes

En España, un 58% de los edificios no cuentan con criterio de eficiencia energética, ya que un 90% de los edificios españoles se construyeron antes de la aplicación técnica CTE y un 60% son anteriores a la aplicación de la primera norma NBE-CT 79 de construcción con apartados dedicados a la eficacia del consumo energético.

La realidad es que el consumo energético español, supera la media de 140 kW/m2 al año, la cual debe ser una tendencia a la baja, para lograr los valores necesarios y colaborar con un uso idóneo de los recursos energéticos.

Es bueno conocer que existen buenos indicios al respecto, ya que la tendencia va a la mejora de esta situación con la aplicación de los certificados energéticos, según datos del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), los cuales indican que su mejora en los edificios ha alcanzado hasta un 50%, con viviendas con reformas para su venta o alquiler.