Hoy en día la vivienda es un bien de primera necesidad para cualquier familia. Sin embargo, acceder a una no es nada sencillo y requiere de una inversión importante.

Para la mayoría de las familias no es posible disponer de los recursos que se necesitan para invertir en la compra de una vivienda. Sin embargo, existen opciones y formas para poder acceder a una vivienda, aunque no dispongas de todo el importe para la compra.

¿Qué es una hipoteca?

La hipoteca es una fórmula de financiación que los bancos ponen a disposición de los usuarios para facilitarles la compra de una vivienda en condiciones asumibles. Una hipoteca es un instrumento financiero que se suele utilizar para la adquisición de un bien inmueble vinculado a un préstamo.

Realmente la hipoteca es un préstamo que está garantizado por el valor de un inmueble. Gracias a la hipoteca el usuario puede recibir una cantidad de dinero que habitualmente se refiere al valor del inmueble y se establece un compromiso de devolución del importe.

Dentro del concepto hay que tener en cuenta que se generan unos intereses y un plazo de amortización. Por tanto, es importante conocer bien las características de la hipoteca y las condiciones que el banco te ofrece antes de decidirte por una u otra.

En la hipoteca la garantía o aval del pago de este tipo de préstamo es el propio inmueble. De esta forma, si por alguna razón no se hace frente al pago, el banco se quedaría con el bien a cambio de su valor.

Tipos de hipoteca

Existen diferentes tipos de hipoteca que pueden clasificarse dependiendo de diferentes criterios. Puedes clasificar las hipotecas dependiendo del tipo de interés o bien en función del tipo de cuota.

Los tipos de hipoteca según el tipo de interés pueden ser diversos:

• Tipo de interés fijo. Estos tipos de hipoteca pueden tener un tipo de interés y unos costes más elevados que otras, aunque el tipo de interés se mantiene constante durante todo el tiempo que dura la devolución del préstamo.
• Tipos de interés variable. La hipoteca con tipo de interés variable puede ir cambiando en función de cómo están los tipos de interés del mercado. Este tipo más habitual y puede haber cambios en los tipos de interés entre los 6 primeros meses y el primer año.
• Tipo de interés mixto. Se trata de un tipo de préstamo hipotecario donde se combina una parte de tipo de interés fijo con una parte de tipo de interés variable.

También es posible encontrar tipos de hipoteca con diferentes tipos de cuota. En esta clasificación habría una cuota constante o fija. Este tipo se establece un primer año en el que se pagan principalmente intereses y en los años sucesivos se va pagando capital.

Otro tipo de cuota es la cuota blindada. Con esta cuota se paga siempre la misma cantidad. No obstante, si los intereses cambian lo que se varía son los plazos de amortización que podrán aumentar o disminuir.

La hipoteca con cuota final es un tipo que establece una menor cuota durante todo el periodo, pero habrá un último tramo de pago de cuota por el importe pendiente. Con este tipo de hipoteca hay que ahorrar para hacer el pago final.

También existe la modalidad de cuota creciente por la cual la cuota que se va pagando puede ir creciendo con el tiempo. Finalmente, la cuota solo intereses sería la menos habitual en la que se pagan solo intereses. Tras este periodo habría que pagar el total del préstamo pendiente.

Cómo elegir una hipoteca

Si te estás planteando elegir una hipoteca para la compra de tu vivienda, tendrás que analizar muchos aspectos como pueden ser el hecho del importe a abonar mensualmente, los tipos de interés, las comisiones que te cobrará el banco por pago anticipado, los plazos de amortización, etc.

Es importante que puedas comparar las diferentes propuestas que encuentres en el mercado para seleccionar la que encaje mejor con tus necesidades y con tus posibilidades. Un aspecto importante a tener en cuenta es la flexibilidad que puede darte el banco a la hora de amortizaciones anticipadas y del pago de diferentes cuotas.