Aesval

Cómo elegir a un tasador inmobiliario calificado y confiable

Debes saber cómo elegir un tasador inmobiliario cuando quieres o necesitas determinar el valor de una propiedad por diferentes motivos: por razones de compraventa, por división de bienes o porque vas a hipotecar una propiedad, o vas a usarla como respaldo en una negociación. 

Un tasador inmobiliario es un profesional experto en valorar bienes inmuebles y capacitado para certificar este valor de manera oficial en trámites relacionados con compraventa, hipotecas, valoración de patrimonios, juicios, etc. En Aesval, como sociedad de tasación homologada por el Banco de España, disponemos de una red de colaboradores de maestros tasadores por toda España. 

La tasación de un inmueble valora aspectos tales como: superficie del terreno, condición del inmueble, ubicación, cercanía a lugares de interés, acceso, vista, iluminación natural, estado del edificio (cuando se trata de un piso), etc. 

Es importante saber cómo elegir un tasador inmobiliario porque su valoración de la propiedad es la que va a servir de base para cualquier negociación que se realice con una propiedad.  

Para que la valoración del tasador sea aceptable, debe de estar respaldado por una sociedad de valoración homologada, como es Aesval. 

Cómo elegir un tasador: condiciones y requisitos 

Estas son algunas recomendaciones y tips para saber cómo elegir un tasador en cuyo trabajo puedas confiar. 

Que esté homologado por el Banco de España 

Vas a encontrar muchos peritos y arquitectos fiables para valorar tu propiedad y cualquier otra que sea parte de un litigio o esté en venta, y a los que acuden abogados y otros expertos cuando necesitan una valoración. 

Pero es obligatorio que además estén homologados por el Banco de España, sobre todo cuando la tasación inmobiliaria se está haciendo para solicitar un préstamo hipotecario, o cuando la intención es hipotecar la vivienda para obtener un préstamo. 

Por eso es importe que acudas a una empresa especializada en el sector y avalada por el máximo organismo bancario de nuestro país.

En Aesval, te podemos asesorar de la mejor manera. 

Profesionalidad del tasador 

Revisar la profesionalidad o la tasadora, cuál es su trayectoria y cuáles son sus acreditaciones es otro básico dentro de este proceso de selección. 

En Aesval, llevamos más de 10 años realizando valoraciones de todo tipo y no solo en Asturias, también por otras Comunidades Autónomas. 

Consulta en internet y las redes sociales 

Otra manera de saber cómo elegir un tasador es acudiendo a internet y las redes sociales. En nuestra web y redes sociales, podrás seguir la actividad de Aesval como sociedad de tasación y ver, de primera mano, nuestros valores, compromisos y día a día. 

Consulta con abogados, agentes inmobiliarios y amigos 

Si tienes amigos o conocidos que hayan realizado trámites inmobiliarios, vale la pena consultar con ellos sobre cómo eligieron el tasador y cuáles fueron los parámetros que siguieron para su elección. 

Hemos realizado más de 17 000 tasaciones en la última década y tenemos claro que el objetivo es mejorar en el futuro. 

No tomes una decisión apresurada 

Si estás tramitando un préstamo hipotecario, tendrás tiempo suficiente para elegir un tasador que esté cualificado y sea fiable. Puedes pedir presupuestos a varias empresas tasadoras, y estudiar sus antecedentes antes de elegir la que más convenga a tus intereses y te genere más confianza. 

No olvides que una buena valoración de la propiedad se va a reflejar en el precio final de la vivienda, en el importe del préstamo si estás solicitando uno, y en los beneficios económicos si estás vendiendo la propiedad. 

Tampoco te confíes en las tasaciones gratuitas que te ofrecen las inmobiliarias, o en las que puedes conseguir en internet, aunque puedan funcionar como referencia antes de hacer la tasación oficial. 

Es muy probable que la tasación oficial no coincida con las tasaciones gratuitas o realizadas por plataformas virtuales, ya que no son trabajos que se puedan comprar. Una tasación oficial requiere de unos trámites y trabajos muy profundos, en comparación con una gratuita.